Una de las cosas curiosas que me encuentro constantemente en China (al menos en Changsha) es la abundancia de ropa en general (especialmente camisetas) con una sátira de frases acerca del positivismo, tales como “la vida es bella”, “un día sin sonreír es un día perdido” y demás mantras que son virales en la red y que personalmente los encuentro tediosos, no porque no sean verdad, sino porque los que tanto proclaman estos mantras generalmente son los que menos los pueden llevar a cabo.
En mi otro blog (Q.E.P.D.) escribí acerca de los efectos negativos de tanto positivismo, y de la necesidad de también recordar el negativismo y aquellas cosas que algunas veces nos hacen miserables, ya que sin éstas, la vida no está en equilibrio.
Constantemente cometemos errores, y para aquellos que ya se nos ha vuelto costumbre tomar decisiones radicales (tomar un avión y dejarlo todo atrás), nos invaden frecuentemente las dudas y las preguntas acerca de si hemos o no hecho bien; muchas veces estamos arrepintiéndonos de decisiones, pero que, en caso de no haberlas tomado, no estaríamos en donde estamos ahora.
Creo que esa es la clave de vivir una vida al máximo: sencillamente es tomar aquellas decisiones que creemos correctas, y con el paso del tiempo, evaluarlas, agradecer por haberlas tomado, arrepentirnos y perdonarnos. El mejor secreto para sentirnos en paz con nosotros mismos, es tomar decisiones; seguramente nos arrepintamos, o puede que no, pero el peor remordimiento que podemos tener es vivir con la constante idea de ¿qué hubiese pasado si…?
Dejo este link de una charla TED, acerca de la importancia de perdonarnos por aquellas decisiones de las cuales nos arrepentimos.